jueves, 11 de julio de 2013

ORDEN de 25 de junio de 2013 por la que se aprueba la convocatoria para la concesión de subvenciones públicas en materia de formación de oferta

Publicada hoy, Jueves, 11 de julio de 2013, la ORDEN de 25 de junio de 2013 por la que se aprueba la convocatoria para la concesión de subvenciones públicas en materia de formación de oferta, correspondientes al ejercicio 2013, destinadas a la realización de Planes Formativos dirigidos prioritariamente a trabajadores ocupados por las entidades y centros de formación acreditados, en el ámbito de la Comunidad Autónoma de Extremadura.

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martes, 9 de julio de 2013

Convocatoria 2013 de subvenciones de acciones formativas dirigidas a personas desempleadas

Publicada la convocatoria 2013 de subvenciones de acciones formativas dirigidas a personas desempleadas

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Formación dirigida prioritariamente a trabajadores desempleados


Convocatoria 2013 para la concesión de subvenciones públicas, en materia de formación de oferta, destinadas a la realización de acciones formativas incluídas en la oferta preferente del Servicio Extremeño de Empleo y dirigidas prioritariamente a trabajadores desempleados


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lunes, 1 de julio de 2013

Interesante entrevista realizada a Alfonso Luengo, Director Gerente de la Fundación Tripartita

Director gerente de la Fundación Tripartita

Alfonso Luengo: “La formación ahora es más eficiente”

Recientemente, la Fundación Tripartita, entidad  que gestiona los créditos de formación para el empleo), ha hecho balance del ejercicio pasado. Los datos recogen un incremento del número de trabajadores y de empresas que participan en la formación para el empleo.

“Este es un sistema que da formación a 3,4 millones de trabajadores y que financia la formación a 460.000 empresas”, recuerda Alfonso Luengo, su director gerente. Y eso con un presupuesto menor, de 480 millones de euros, gracias a que “la formación ahora es más eficiente; con menos recursos llegamos a más trabajadores”. En esta entrevista abordamos con Alfonso Luengo esta cuestión, la calidad y necesidades formativas de las empresas, el acceso de las micropymes y las acciones de apoyo al emprendimiento.
Pregunta: Con cerca del 27% de la población activa en el paro, ¿qué aspectos hay que mejorar en la formación para el empleo?
Respuesta: España tiene un serio problema cultural con la formación. Hemos entendido que formación era igual a enseñanza superior y que esta garantizaba un empleo. Como consecuencia, tenemos una tasa muy baja de formados en niveles medios. Y el futuro apunta a que los 8,5 millones de puestos de trabajo netos que se van a crear en los próximos años, según Cedefop, van a requerir competencias de este rango, precisamente en los que estamos más escasos. Si no corregimos esa brecha, cuando España reactive su economía y empiece a exigir habilidades de este grado medio, habrá que buscarlos fuera. Tenemos un problema presente, que es el empleo juvenil, pero una situación potencial que en mi opinión es peor aún.

P: Queda claro cuál es el diagnóstico, pero ¿cuál es el tratamiento? 
R: Hay que empezar a ensayar fórmulas alternativas e implicar a todos los agentes sociales, que tienen un protagonismo que no deben perder en el diseño y la planificación del subsistema de formación para el empleo. Ellos también tienen que ser cómplices en el desarrollo de nuevas fórmulas que en otros países han demostrado ser exitosas y que habrá que trasladar al nuestro de forma integrada y adaptada, como la formación en alternancia y la dual. Y también prestigiar la Formación Profesional. No puede ser que sólo el 40% de los alumnos opten por la FP cuando en el resto de Europa viene siendo del 60%. Por eso, el sistema español está pensado en la cualificación y en la acreditación. En los últimos años se ha avanzado mucho. Ya tenemos un marco de certificaciones profesionales (585) que es paralelo, complementario y compatible con el sistema de títulos de la FP. Ese es el camino.

P: ¿Las empresas están aprovechando, en la actual coyuntura, la formación bonificada para mejorar la formación de sus plantillas?
R: Sí. Lo significativo es que con un presupuesto mucho más bajo que el año anterior, el número de trabajadores que se han formado no ha parado de crecer. Y esto se explica porque la formación ahora es más eficiente, es decir, que con menos recursos se llega a más participantes.

P: Qué sectores priman?
R: Intentamos que las convocatorias que gestionamos vengan apoyados por necesidades concretas para un futuro inmediato relacionado con la empleabilidad. No se trata sólo de primar a los sectores que van muy bien, sino de los que no van bien ver cuáles merecen un esfuerzo en formación para que el propio sector se reconvierta.

P: ¿Qué novedades en formación para el empleo veremos en la próxima convocatoria?
R: El año pasado ya se introdujeron algunas novedades como la financiación de los centros de formación, la valoración de la planificación didáctica de los proyectos, la reducción de los costes, la supresión de la modalidad de impartición a distancia (postal), la posibilidad de agruparse para presentar proyectos y planes de formación, el crecimiento de los certificados, el establecimiento de un anexo de certificados prioritarios.

En clave emprendedora

Marco general
“El emprendimiento, con carácter general, es desde 2012 una de las áreas prioritarias, y de hecho una parte importante de los planes, sobre todo a nivel sectorial y de organizaciones, tienen una clara orientación hacia el emprendimiento. En estos momentos, el emprendimiento forma parte, junto a la innovación en los procesos productivos, las tecnologías y la internacionalización, del marco general para promover la formación para el empleo. Y yo entiendo que cualquier formación profesional que tenga ese objetivo aunque sea indirecto, lo cumple ya que es bueno que un ocupado tenga acceso a una formación que le permite convertirse en emprendedor.

O, al menos, que tenga conocimientos para implicarse en una acción de emprendimiento”.

Vías de acceso 
“El sistema es bastante sensible al emprendimiento. Hay dos líneas de formación, que el año pasado se financiaron con cuatro millones de euros cada una, dirigidas preferentemente a empleados, que fueron autónomos y economía social. Ahí el factor emprendimiento es realmente más potente”.